Serapis (Griego ático/jónico: Σέραπις) o Sarapis (Griego dórico: Σάραπις) es un dios grecoegipcio. El culto a Serapis se introdujo en el siglo III a.C. bajo las órdenes de Ptolomeo I de Egipto[1] como manera de unificar a los griegos y egipcios de su reino. El dios se representó con el estilo griego, pero con arreos egipcios, y una iconografía combinada de muchos cultos, significando tanto abundancia como resurrección. Un serapeo (Griego: Serapeion) era cualquier templo o recinto religioso dedicado a Serapis. El culto de Serapis se extendió como una cuestión política deliberada por los reyes ptolemaicos, quienes también construyeron un inmenso serapeo en Alejandría.
Sin embargo, hay pruebas que implican que el culto de Serapis existió antes de que los ptolemaicos llegaran al poder. Tanto Plutarco[2] y Arriano de Nicomedia[3] mencionan un templo de Sarapis o Serapis romano en Alejandría. La afirmación común de que Ptolomeo "creó" la deidad deriva de las fuentes que le describen erigiendo una estatua de Serapis en Alejandría: esta estatua enriqueció la textura de la idea de Serapis mostrándolo con una combinación del estilo griego y egipcio.[4] Aunque Ptolomeo I creara el culto de Serapis y lo apoyara como patrón de la dinastía ptolemaica y Alejandría, Serapis era una deidad sincretizada derivada de la adoración de Osiris y Apis[5] y también obtuvo atributos de ambas deidades, como los poderes ctónicos relacionados con el Hades griego y Deméter, y la benevolencia atribuida a Dioniso.
Serapis continuó ganando popularidad durante el periodo romano, a veces reemplazando a Osiris como consorte de Isis en los templos fuera de Egipto. En 389, una muchedumbre cristiana liderados por el patriarca Teófilo de Alejandría destruyó el serapeo alejandrino, pero el culto sobrevivió hasta que todas las formas de religión pagana se suprimieron bajo Teodosio I en 391.
Sobre el dios[]
"Serapis" es la única forma usada en latín,[6] pero tanto Σάραπις, Sárapis, como Σέραπις, Sérapis, aparecen en griego, así como Σαραπo Sarapo en bactriano.
Su templo más famoso fue el Serapeo de Alejandría.[7] Bajo Ptolomeo Soter, se hicieron esfuerzos para integrar la religión egipcia con la de sus gobernantes helenos. La política de Ptolomeo era encontrar una deidad que pudiera obtener el favor de ambos grupos, a pesar de las condenas de sacerdotes egipcios contra los dioses de los gobernantes extranjeros previos (p.ej: Set, que fue alabado por los hicsos). Alejandro Magno intentó usar a Amón para este propósito, pero era más importante en el Alto Egipto, y no tanto con aquellos en el Bajo Egipto, donde los griegos tenían mayor influencia. Los griegos tenían poco respeto por las figuras con cabezas de animal, por lo que se eligió una estatua antropomórfica con estilo griego como ídolo, proclamándolo como equivalente al popular Apis.[8] Fue llamado Aser-hapi, es decir, Osiris-Apis, que se convirtió en Serapis, y del que se decía que era Osiris al completo, más que solo su Ka (Fuerza vital).
Historia[]
La mención más antigua a Serapis ocurre en la polémica escena de muerte de Alejandro (323 a.C.)[9]. Aquí, Serapis tenía un templo en Babilonia, y es de tal importancia que solo se le pide consulta a él sobre el rey moribundo. La presencia de Serapis en Babilonia alteraría radicalmente las percepciones de las mitologías de esta época: el dios babilónico Ea (Enki), a pesar de no estar relacionado, tenía el título Serapsi, que significaba "rey de la profundidad", y es posible que fuera este el que se menciona en los diarios. La importancia de este Serapsi en la psique helénica, debido a su implicación en la muerte de Alejandro, pudo haber contribuido a la elección de Osiris-Apis como el principal dios ptolemaico.
Según Plutarco, Ptolomeo robó la estatua de culto de Sinope en Asia menor por orden de un "dios desconocido" que se le apareció en un sueño y le dijo que la llevara a Alejandría, donde dos expertos religiosos dijeron que la estatua era de Serapis. Uno de los expertos era de los Eumólpidas, una antigua familia cuyos miembros mantuvieron y dirigieron los Misterios eleusinos durante la época helenística, y el experto egipcio, el sacerdote Manetón, quien dio peso a los juicios de los egipcios y griegos.
Sin embargo, Plutarco pudo no tener razón, ya que algunos egiptólogos alegan que el "Sinope" de la leyenda es realmente la colina de Sinopeion, un nombre dado al lugar del Serapeo existen en Menfis. También, según Tácito, Serapis (es decir, Apis identificado explícitamente con Osiris al completo) había sido el dios del pueblo de Racotis antes de que se expandiera a la capital de Alejandría.
La estatua representaba adecuadamente una figura parecida a Hades o Plutón, ambos siendo reyes del inframundo griego, entronado con el modio, una cesta, en su cabeza, ya que era un símbolo griego para la tierra de los muertos. También sostenía un cetro en su mano indicando su gobierno, con Cerbero, el guardián del inframundo descansando a sus pies. La estatua también parecía ser una serpiente en su base, encajando con el símbolo egipcio del gobierno, el ureus.
Con su esposa Isis y su hijo Horus (en forma de Harpócrates), Serapis ganó un lugar importante en el mundo griego. En la Descripción de Grecia del siglo II d.C., Pausanías señaló los serapeia en las laderas de Acrocorinto, sobre la reconstruida ciudad romana de Corinto y una en Copae en Beocia.[10]
Serapis figuró entre las deidades más importantes cuyo culto fue recibido y diseminado a través del imperio romano, con Anubis identificado a veces con Cerbero. En Roma, Serapis fue identificado con el Iseum Campense, el santuario de Isis construido durante el Segundo Triunvirato en el Campo de Marte. Los cultos romanos de Isis y Serapis ganaron popularidad a finales del siglo I cuando Vespasiano experimentó los sucesos que atribuyó a su acción milagrosa mientras estaba en Alejandría, donde estuvo antes de volver a Roma como emperador en el año 70. De la dinastía Flavia en adelante, Serapis era una de las deidades que podía aparecer en las monedas imperiales junto con el emperador gobernante.
El culto principal en Alejandría sobrevivió hasta finales del siglo IV, cuando una muchedumbre cristiana destruyó el serapeo de Alejandría en 385. El decreto teodosiano de 380 incluyó implícitamente este culto y la proscripción general de otras religiones distintas a las formas aprobadas del cristianismo de Nicea.
Referencias[]
- ↑ "Sarapis" in The New Encyclopaedia Britannica. Chicago: Encyclopaedia Britannica Inc., 15th edn., 1992, Vol. 10, p. 447.
- ↑ Vida de Alejandro, 76
- ↑ Anábasis, VII, 26, 2
- ↑ Stambaugh, John E. (1972). Sarapis Under the Early Ptolemies, E. J. Brill, pp. 1–13.
- ↑ Youtie, H. 1948. “The Kline of Sarapis”. The Harvard Theological Review, vol 41, pp. 9–29.
- ↑ Consultando el Lewis and Short Latin lexicon completo muestra que "Serapis" era la única versión latina del nombre en la antiguedad A Latin Dictionary on Perseus Project. Lewis, Charlton; Short, Charles (1879) (1879) A Latin Dictionary, Oxford: Oxford University Press, p. 1630. A Latin Dictionary, p. 1678. En el Internet Archive.
- ↑ "De los santuarios egipcios de Serapis el más famoso está en Alejandría", Pausanías señaló (Descripción de Grecia, 1.18.4, siglo II d.C.), describiendo en Serapeion en Atenas erigido por Ptolomeo en la pronunciada pendiente de la Acrópolis: "Mientras desciende de aquí a la parte baja de la ciudad, está el santuario de Serapis, cuya doración introdujeron los atenienses de Ptolomeo."
- ↑ Según la nota de Sir James George Frazer Biblioteca, 2.1.1: "Apolodoro identifica al Apis de Argos con el toro egipcio Apis: "De los santuarios egipcios de Serapis el más famoso está en Alejandría, el más antiguo en Menfis. En este ni extraño ni sacerdote puede entrar, hasta que entierren a Apis" (Pausanías,Descripción de Grecia, 1.18.4).
- ↑ Contado por Arriano, Anábasis, VII. 26.
- ↑ Pausanías 2.4.5 y 9.24.1.